Productos nutricionales y médicos
Nutrición para lactantes y niños pequeños
Nutrición para lactantes
La leche materna humana es considerada, de manera general, como el alimento ideal para los recién nacidos, y se piensa que su composición es el resultado de los efectos del tiempo y la evolución en el compromiso nutricional entre madre e hijo. La leche humana, junto con los componentes nutricionales, contiene una increíble variedad de ingredientes biológicamente activos, entre los que se incluyen anticuerpos, enzimas funcionales, factores de crecimiento, factores de protección gastrointestinal, células inmunitarias funcionales y fuentes de nitrógeno no proteico. Los cambios en la composición que se producen durante el curso de la lactancia hacen que la leche humana sea un alimento para lactantes sumamente complejo.
El desafío de fabricar una fórmula para lactantes que sea exactamente igual a la leche humana va mucho más allá de las capacidades actuales de los productores. Sin embargo, en las últimas décadas, se han logrado grandes avances en la producción de fórmulas para lactantes sanas desde el punto de vista nutricional, las cuales imitan muchas de las principales características de la leche humana. Las fórmulas para lactantes a base de proteínas de leche de vaca se utilizan para brindar un apoyo nutricional óptimo a los lactantes que, por diversas razones, no pueden ser o no son amamantados.
Las proteínas de suero de leche estadounidenses son utilizadas ampliamente por los fabricantes de fórmulas para lactantes a fin de ajustar la composición de proteínas de las fórmulas para lactantes a base de leche de vaca. La adición de proteína de suero de leche en las recetas de fórmulas a base de leche de vaca es necesaria para ajustar la relación suero:caseína de aproximadamente 20:80 de la leche de vaca a la relación 60:40 de la leche materna humana. La proteína de suero de leche complementaria también se utiliza en fórmulas para lactantes más grandes y niños pequeños, y las proteínas hidrolizadas se utilizan en productos para lactantes que tienen alergia a las proteínas de leche de vaca. En el caso de la alergia a la proteína de la leche, la proteína de suero de leche altamente hidrolizada se utiliza cada vez más en la fórmula hipoalergénica, que se recomienda con frecuencia para los bebés que muestran un riesgo alto de tener alergia a la leche de vaca. El uso del suero de leche se debe a su alto valor biológico y a su sabor y olor superiores, en comparación con la caseína hidrolizada.
El interés en el uso de proteína de suero de leche de vaca enriquecida en alfa-lactoalbúmina también está en aumento debido a su alta concentración en la leche humana y a su perfil de aminoácidos beneficiosos. Se ha planteado la hipótesis de que un concentrado de proteína de suero de leche enriquecido con alfa-lactoalbúmina facilitaría la obtención de un perfil de aminoácidos plasmáticos muy similar a la leche humana. La alfa-lactoalbúmina tiene altas concentraciones de cistina y triptófano.
También se ha determinado que las fracciones de proteínas presentes en el suero de leche, como la lactoferrina, tienen propiedades bioactivas en concentraciones bajas. La lactoferrina es una proteína con varias características funcionales interesantes, entre las que se incluyen propiedades antibacterianas y antivíricas, la prevención del crecimiento de organismos patógenos en el intestino, la estimulación del sistema inmunitario, la regulación del metabolismo del hierro y el control del daño de las células o los tejidos. Parte del interés en enriquecer las fórmulas para lactantes con lactoferrina surge a partir de la comparación de la leche humana con la leche de vaca. La concentración de lactoferrina en la leche humana es de 0,20 g/100 ml, frente a 0,01 g/100 ml en leche de vaca madura.
Para obtener más información sobre el uso de ingredientes de suero de leche estadounidenses en fórmulas para lactantes, descargue la monografía: U.S. Whey Products & Child Nutrition (Los productos de suero de leche estadounidenses y la nutrición infantil) (disponible en inglés).
Nutrición infantil
El consumo de productos lácteos es igualmente esencial para los niños en etapa de crecimiento y los adolescentes. La leche con bajo contenido de grasa y sin grasa, con o sin sabor, cumple una función vital en las comidas, tanto en la casa como en la escuela. Esto incluye ayudar a los niños a satisfacer las necesidades de nutrientes esenciales como el calcio, la vitamina A, la vitamina D, la vitamina B12, el potasio, la riboflavina, la niacina, el fósforo y las proteínas. El calcio de los lácteos ayuda considerablemente a los niños a desarrollar y mantener huesos y dientes sanos.
Para obtener más información sobre la función de los productos lácteos en la nutrición de niños pequeños, visite el sitio web del Concilio Nacional de Productos Lácteos (disponible en inglés).