La pizza tiene sus orígenes en Italia, pero en la actualidad es un platillo completamente estadounidense que se encuentra en todo el mundo. Los estilos y los ingredientes varían, desde las porciones de pizza de masa fina de Nueva York hasta las pizzas estilo Chicago, desde el clásico salchichón hasta los creativos ingredientes que se encuentran en California, pero el queso siempre está presente. Los proveedores de pizza componen el segmento más grande del sector gastronómico, con más de 70 000 ubicaciones en los Estados Unidos solamente (PMQ, 2014). La pizza ya constituye el mayor uso del queso en la distribución de alimentos, y se prevé que el crecimiento continúe.

El atractivo internacional es claro: la pizza actualmente aparece en los menús de más de 120 países. La amplia disponibilidad fue desencadenada por el desarrollo del queso mozzarella de baja humedad en los Estados Unidos (en las variedades de leche entera y leche parcialmente descremada). Esta creación consiste en un queso fundido que se puede enfriar para distribuirlo a nivel regional o congelar para el transporte internacional. El desarrollo del proceso de congelación rápida individual permite que los fabricantes de pizzas tengan acceso a un queso rallado de primera calidad, totalmente confiable, que minimiza los costos laborales de la preparación de alimentos.  

La industria láctea estadounidense creó el "queso para pizza" moderno y perfeccionó el proceso de envío internacional, y los productos estadounidenses continúan innovando y elaborando una amplia variedad de quesos para ayudar a los chefs a crear pizzas únicas y deliciosas. Obtenga más información sobre los productos lácteos estadounidenses en la sección Productos.

Tendencias de la pizza

Dos demandas de los consumidores impulsan las tendencias del segmento de las pizzas: alimentos "más saludables para mí" y sabores fuertes. La tendencia de salud se expresa con el mayor uso de verduras en lugar de carnes, y con el impulso hacia las variedades de masas que atienden las demandas relacionadas con las dietas, por ejemplo, masas de trigo integral o libres de gluten. Los perfiles de sabores audaces se pueden obtener fácilmente, con las mezclas de quesos para pizzas a base de mozzarella que incorporan pequeñas cantidades de quesos más intensos para brindar satisfacción adicional al paladar. Las mezclas de quesos también pueden mejorar el desempeño general.

Mezclas para lograr un desempeño óptimo

El queso mozzarella parcialmente descremado sigue siendo el producto dominante del mercado de quesos para pizzas, y es probable que mantenga su liderazgo. El queso mozzarella parcialmente descremado, la opción más económica para cubrir una pizza, se dora perfectamente, en un proceso que también suma un sabor profundo y delicioso, y resiste parcialmente la fluidez. Las mezclas que reemplazan del 20 % al 50 % del queso mozzarella parcialmente descremado con quesos de leche entera, como el provolone, el monterey jack y el cheddar, brindan nuevos sabores y mejoran la cobertura fundida sin problemas de liberación de aceite. El queso cheddar coloreado es una opción popular, ya que brinda mayor profundidad a la percepción del dorado.   

Quesos de especialidad y artesanales

El deseo de los consumidores de opciones de sabor intenso y "saludables para mí", y el interés en los productos sostenibles y naturales crea nuevas oportunidades para el uso de quesos de especialidad y artesanales en el segmento de las pizzas. Las mezclas que incorporan quesos como el queso feta, azul, parmesano y romano brindan un exquisito sabor con un volumen de uso relativamente pequeño. Desde las principales cadenas con opciones de menús de mezclas inusuales de quesos hasta las pizzerías locales con fabricantes de quesos locales que crean platillos únicos de autor, los quesos de especialidad y artesanales les brindan un atractivo sofisticado a las pizzas.